Una tranquila y suave víspera de Noche Vieja. Todo va como debe ir: El árbol de Navidad espera el comienzo de la fiesta, los coches se apresuran a terminar sus asuntos, un peatón solitario va a una fiesta con un gorro de Papá Noel puesto y con flores. No se sabe adonde va ni con quién va a celebrar la fiesta del Año Nuevo, si con su pareja o en compañía de un gran grupo de amigos. Aquí está abierta la posibilidad de imaginar lo sucedido…